Reseña: Did you wonder who fired the gun? – Manzana podrida (FIDOCS 21)

Habitualmente, el llamado cine noir encierra dentro de su estructura, más o menos conocida, algún tipo de crítica hacia determinados aspectos problemáticos, soslayados de lo social. A través de la clásica lógica de identificar malhechores, asesinos, embaucadores o psicópatas, el género se vale del suspenso para, entre líneas o de forma explícita, denunciar, problematizar o visibilizar la corruptela putrefacta subyacente a procedimientos oficiales o prácticas institucionales que se precian de ser inmaculadas. En este sentido, no nos dicen nada nuevo, pero aciertan al develar la complejidad de las condiciones donde se fraguan las decisiones respecto de lo bueno, lo malo, lo correcto y lo inmoral.

A propósito de las convenciones del género policial, Travis Wilkerson reconstruye, en Did you wonder who fired the gun?, un antiguo caso policial que le resulta, lamentablemente, demasiado familiar. Siete décadas atrás, en un pueblo de Alabama, el soslayo del sistema judicial ante la herida mortal que le infringe su bisabuelo a un afroamericano, permite que un sujeto, en razón de su raza, pueda gozar de una impunidad que el realizador no es capaz de soportar. El realizador se obsesiona con llegar a conocer en qué circunstancias este crimen se comete, por qué los expedientes del caso han sido obliterados de la burocracia judicial, y cuáles fueron los efectos de este incidente a nivel familiar. El caso le llega muy de cerca en lo personal, pero también en lo que atañe a su lugar como sujeto social, siendo Wilkerson un hombre, padre de familia, residente de un estado ex-confederado, caucásico y norteamericano.

En este sentido, la investigación documental que expone a lo largo del metraje se encuentra muy cercana al noir más clásico en términos de timing y estética, a partir de una especie de genealogía de un crimen que le quita el sueño. Residente de un estado del Sur norteamericano profundo, escuchamos en off a Wilkerson recitando lo que es la crónica de su seguimiento de dicho proceso; su periplo por Dothan, su pueblo natal, buscando pistas que le permitan construir el sentido de la intriga. Wilkerson retorna a Alabama, cuatro décadas después de haber migrado, a la escena el crimen y entrevista a quienes pueden quizá tener algo que contar al respecto. Hasta que, de repente, el caso adquiere una dimensión perturbadora: es posible que todo el acontecimiento lo explique –o lo enrede– la connotación racial que determina la historia de su país. Y que se inscribe a fuego en su propia vivencia.

Es ahí, donde el documental gira hacia su faceta más lúcida y aguda, cuando Wilkerson escudriña en las determinaciones estructurales del hecho. El crimen presuntamente tendría connotaciones raciales y él, al mismo tiempo, padece esas mismas condiciones, no en términos de privilegios, sino que en tanto carga residual que debe soportar. Cuando concluye, son los blancos quienes van a terminar por incendiar al mundo, el documental adquiere un posicionamiento fulminante que interpela al espectador. El asesinato se politiza. Vivencia, relato e historia se enmarañan en una mezcla narrativa rabiosa, febril, pero hasta cierto punto demasiado culpabilizada.

En este sentido, Did you wonder who fired the gun? es un ejercicio que nos explota en la cara. Una propuesta quizá levemente autocompasiva, pero audaz, que se vale del suspenso para contrabandearnos una declaración tan vívida como la obsesión insidiosa que no lo deja tranquilo: hasta qué punto las vidas negras valen. Wilkerson, eso sí, no le teme a jugar con fuego: por ejemplo, cuando se pregunta hasta qué medida Matar a un ruiseñor, esa fábula canónica sobre la épica blanca defensora de las minorías, oculta, al igual que cualquier policial que se precie de tal, la putrefacción hipócrita del germen caucásico inherente del ocio racial. Tenemos aquí un documental autoconsciente, lacerante y explosivo sobre un problema racial que nunca se ha acabado, y que brilla cuando quiere indagar en un crimen proscrito: porque nunca deja de problematizar la debacle furibunda de una identidad blanca siempre cercana al despeñadero.

Did you know wonder who fired the gun? (2017, 90 mins.) Travis Wilkerson, Estados Unidos.

646218256_1280x720

ClaudioSH

Claudio es psicólogo. No se encuentra mucho en eso de ser cinéfilo. Ni menos, amante del cine: ve películas porque está acostumbrado, porque no es demasiado caro y porque, tal vez, fue lo único que se le ocurrió hacer con el tiempo que le queda disponible.